01-03-2014, 02:59 AM
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Se trata de El Jardín de las delicias, el tríptico que es considerado su obra maestra absoluta. Entre las cientas de figuritas estaba escondida una partitura que, 508 años después, ha sido descubierta e interpretada.
Más de cinco siglos después de haber sido pintado, El jardín de las delicias, la obra maestra de El Bosco que se puede contemplar en el Museo del Prado, sigue sorprendiendo a expertos y aficionados a la pintura. Desde que fue adquirido por el rey Felipe II, cientos de historiadores han investigado este tríptico que representa al paraíso, a un lujurioso jardín de las delicias y al infierno; su modernidad sigue sorprendiéndonos hoy en día y ha sido fuente de inspiración para, entre otros, Salvador Dalí gran admirador del pintor flamenco.
A pesar de que el cuadro cuenta con más de quinientos años de historia, cada nueva investigación ofrece extraños descubrimientos que no hacen más que aumentar el halo de fascinación y misterio que envuelve a la obra. El último en sumarse a esa lista, y que fue desvelado por el blog musical «Elepé», es la existencia de una partitura musical escondida en el cuadro, que hasta el momento no había sido descubierta ni estudiada.
La partitura, escrita en notación mensural, fue descubierta por dos estudiantes estadounidenses en la sección dedicada al infierno y se encuentra repartida entre un libro y las nalgas de la figura de un hombre que está tumbado en el suelo.
Más de cinco siglos después de haber sido pintado, El jardín de las delicias, la obra maestra de El Bosco que se puede contemplar en el Museo del Prado, sigue sorprendiendo a expertos y aficionados a la pintura. Desde que fue adquirido por el rey Felipe II, cientos de historiadores han investigado este tríptico que representa al paraíso, a un lujurioso jardín de las delicias y al infierno; su modernidad sigue sorprendiéndonos hoy en día y ha sido fuente de inspiración para, entre otros, Salvador Dalí gran admirador del pintor flamenco.
A pesar de que el cuadro cuenta con más de quinientos años de historia, cada nueva investigación ofrece extraños descubrimientos que no hacen más que aumentar el halo de fascinación y misterio que envuelve a la obra. El último en sumarse a esa lista, y que fue desvelado por el blog musical «Elepé», es la existencia de una partitura musical escondida en el cuadro, que hasta el momento no había sido descubierta ni estudiada.
La partitura, escrita en notación mensural, fue descubierta por dos estudiantes estadounidenses en la sección dedicada al infierno y se encuentra repartida entre un libro y las nalgas de la figura de un hombre que está tumbado en el suelo.